18 de octubre de 2012

Pasión voraz

He intentado alejarme de tí muchas veces, encerrarte en el más profundo abismo de olvido, y aún así, mi corazón, siempre hallaba la manera de llegar a ti.

Y así fue, como me dí por vencida en mi desesperada lucha de desprenderme de tu recuerdo, porque estoy aferrada a ti, más allá de los sentimientos... Tú eres yo, y yo soy tú, un continuo espejo, dos amantes en un mismo cuerpo, dos corazones en un mismo latido, una emoción desaforada de placer...
Pues yo me entrego a ti en una renuncia de no poseer mi cuerpo, pues tuyo es. Envuélveme en tus palabras y guíame por este suicidio de delirio del que soy esclava, pues no hay día que no rompa mis cadenas, y aún así permanezca a tú lado, amándote...

Eternamente tuya, sin noción de tiempo, sólo tús manos sobre mí, marcando el compás de nuestros cuerpos.
- ¿Qué soy yo sin ti? -me preguntan tus besos en cada avído aliento de amor.
- Eres tú sin mí, igual que sería yo sin tí : un cuerpo incompleto, la mitad de un corazón, un deseo incompleto de dos...- responden mis entrecortados y exhaustos suspiros.

Y ésta es nuestra condena, una pasión que nos  consume, nos debora desde las entrañas, con hambre de tí, con sed de mí... sedúceme una vez más, pues voy a seguir insaciable de tus besos y famélica de tí.




"Y yo sigo llena de amor por todo aquello que te pertenece, llena de celos por todo lo que te roza y me quita un trocito de ti. Y tú siques aquí, entregándome la vida en cada suspiro, suplicando por mis besos sin saber que ni siquiera tienes que pedirlos. Porque son tuyos, porque yo ya no soy mía, sino tuya."